Terror biológico en el océano – Neasa Hardiman y Hermione Corfield frente a lo ignoto

Contagio en alta mar

Por Mario Ballesteros

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Calificación

 3/5

SEA FEVER, OPERA PRIMA DE REALIZADORA VETERANA

A pesar de ser su primer trabajo para la gran pantalla, Neasa Hardiman puede presumir de tener una amplia trayectoria en la dirección de grandes productos televisivos como Happy Valley o Jessica Jones… Contagio en alta mar (Sea Fever) nos llega tras su paso por los festivales más representativos del cine de género, como el Festival de Toronto, la Semana de Cine Fantástico y de Terror de San Sebastián o la pasada edición del Festival de Sitges.

HERMIONE CORFIELD, UNA BIÓLOGA CON MAL FARIO

Siobhán (Hermione Corfield) es una bióloga marina que recala en la tripulación del Niamh Cinn Óir, un barco pesquero donde deberá llevar a cabo un trabajo de campo. La tripulación, dirigida por un matrimonio en dificultades económicas, acoge con recelo a la joven científica por ser pelirroja, y considerar esto un mal presagio. Una vez en alta mar, el barco es inmovilizado por una gigantesca criatura con tentáculos, que segrega una extraña y viscosa sustancia. Varados en aguas restringidas, los tripulantes comienzan a sufrir una enfermedad parasitaria que les provoca la muerte tras una extraña fiebre.

ATMÓSFERA AGOBIANTE CON PEDIGRÍ CINÉFILO

Este es el punto de partida de Contagio en Alta Mar, una historia de misterio y de terror biológico que discurre a bordo de un barco en medio del océano. Quizá sea eso mismo, la inquietante puesta en escena, su principal valor. La cinta bebe de esa peculiar atmósfera claustrofóbica que se respiraba en otras películas de terror marino, como Abyss (James Camero 1989), la más reciente Niebla (Shim Sung-bo, 2014) o la española REC 4: Apocalípsis (Jaume Balagueró, 2014).

REPARTO CORAL CON TRAZOS GENÉRICOS

Al transcurrir toda la acción en un barco, el peso entero de la cinta recae sobre un reparto coral encargado de sostener la tensión de la película. En este sentido, algunos de los personajes de Contagio en alta mar resultan un tanto esquemáticos, lo que puede excusarse al tratarse de un film que por momentos coquetea con los tropos propios del slasher y aquello de que cualquier personaje es prescindible en favor del suspense… Aquí cabría resaltar al capitán del barco (interpretado por Dougray Scott, Batwoman) un personaje empecinado en tomar mala decisión tras mala decisión de una manera tan recurrente que puede provocar cierta sorna en el espectador.

UNA HISTORIA CON MUCHO POTENCIAL, PERO NO DEL TODO APROVECHADO

Contagio en alta mar posee la invectiva y contiene casi todos los elementos que se precisan en cualquier película destinada a los fans del cine de suspense y de terror, pero quizás adolece en algunos momentos de arritmias que hacen que se diluya la atención del espectador. Su indefinición en el target genérico (a veces una horror movie con monstruo marino, por momentos slasher, casi siempre suspense psicológico) también puede lastrar su recepción. En cualquier caso, más luces que sombras en una película más que sugerente que además invita a pensar con optimismo en los venideros trabajos de su directora.