SIEMPRE JUNTOS – BEZINHO

por Aida González Arenas

Comparte esta crítica
Bezinho se estrena el 3 de agosto de 2018

El director brasileño Gustavo Pizzi retrata en su esencia lo que significa pertenecer a una familia, y en especial ser madre. Los temores, las angustias, ese universo de cariño y expectativas, a veces frustradas, es lo que podemos emular con el visionado de Siempre Juntos (Benzinho), premiada con la Biznaga de Oro a la Mejor Película Iberoamericana en el Festival de Málaga y que ahora se estrena en nuestro país. 

El film nos cuenta la historia de Irene, una madre de familia de unos cuarenta años que vive junto a sus cuatro hijos en Petrópolis (Río de Janeiro). Fernando, el hijo mayor, recibe una oferta: un equipo de balonmano alemán quiere contratarle. Esto obligará a Irene a aprender a construir un nuevo día a día, manteniendo a su familia unida.

Siempre juntos es una tragicomedia brasileña que se sustenta, fundamentalmente, en el personaje de Irene, interpretado por Karine Teles -a la que ya pudimos ver en Una segunda madre y que, además, es co-autora del guion de la película-. El film se contagia del espíritu de esta madre coraje que intenta, por todos los medios legítimos, sacar a su familia adelante a pesar de las adversidades que se le puedan presentar. Nos encontramos además con un reparto coral que, a pesar de estar jerarquizados por los actos de Irene, tienen sus propias tramas más o menos desarrolladas. Así tenemos a Klaus, el padre de familia, interpretado por Otávio Müller, propietario de una desahuciada papelería y que representa el sostén de Irene en los momentos más críticos, a pesar de no estar todo lo presente que debería. Otro de los ejes de la película, que protagoniza además una de las tramas paralelas es Sônia, interpretada por Adriana Esteves, la hermana de Irene, que es maltratada por su marido y se marcha a vivir con la familia de Irene junto a su hijo pequeño. Además de la violencia de género, y a nivel temático, acompañan al retrato familiar otras peculiaridades de la realidad socioeconómica brasileña, como es la profunda división en clases sociales que todavía subsiste en el país. 

La película persigue el detalle descriptivo y emocional y retrata la intimidad de una familia que, a pesar de las adversidades cotidianas, permanece unida. Asistimos como voyeurs también a los escasos momentos de soledad que se permite Irene, a sus deseos de rendirse que son derrotados por la fuerza y las ganas de seguir adelante, incluso aunque esto signifique un sacrificio más generoso. Siempre juntos es cine cotidiano, en el que las cosas más pequeñas se convierten en grandes retos, y que te deja con un buen sabor de boca porque, al fin y al cabo, casi todo termina de la mejor manera posible.

Reproducir vídeo
Calificación de la película

La película de la semana: "ÚLTIMAS CRÍTICAS"

Síguenos en las Redes Sociales

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Puedes usar las siguientes etiquetas y atributos HTML: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <s> <strike> <strong>