La muestra abrió un 19 de julio y se mantuvo hasta el 30 de noviembre. Por los salones del Instituto de Arqueología de Múnich se presentaron cerca de 600 obras de algunos artistas cuyo legado es hoy indiscutible: Marc Chagall, Wassily Kandinsky, Paul Klee, Oskar Kokoschka, George Grosz, Emil Nolde y Ernst Ludwig Kirchner, entre otros maestros del modernismo.
Tras este impactante comienzo, somos testigos del devenir de un artista, Kurt, inspirado en la vida real de Gerhard Richter, durante tres horas de metraje que pasan en un suspiro. Asistimos a su formación en el nazismo, el fracaso del Este y finalizamos en su huida a Occidente, donde encuentra su verdadera voz en el ejercicio de la libertad artística, sin olvidar el pasado: el suegro del pintor también fue un alto cargo en el Reich y había conseguido camuflarse con la apariencia de un honorable y respetado médico.