por Adelaida Valcarce
Book Club es la primera película como director de Bill Holderman, más conocido en su faceta de productor por su estrecha relación con Robert Redford, a quien le ha producido títulos como Un paseo por el bosque, Cuando todo está perdido o Leones por corderos. En la ficción, un grupo de féminas, integrado por Diane (Diane Keaton), quien ha quedado viuda recientemente, Vivian (Jane Fonda), una empresaria exitosa que se reencuentra con su primer amor, Sharon (Candice Bergen), una rígida jueza que padece su separación al ver a su ex con una mujer mucho más joven que ella, y Carol (Mary Steenburgen), que sufre cuando empieza a fallar el componente sexual en su relación; pertenecen a un club de lectura que comienza a leer el libro “Cincuenta sombras de Grey”, lo que supondrá un punto de inflexión en sus vidas, al convertirse la novela en la espoleta que pone a prueba las trabas emocionales de sus relaciones amorosas.
Como no podía ser de otro modo, a las cuatro estrellas protagonistas les acompañan actores de primera. Nada más y nada menos que Andy García (Mamma Mia: Una y otra vez), Craig T. Nelson (La joya de la familia), Don Johnson (Django desencadenado) y Richard Dreyfuss (Tiburón) completan el reparto de Book Club. Sin embargo, todos ellos interpretan papeles tan simples como los de sus enamoradas y no se echa en falta el galán talludito, el marido que pierde el interés sexual, el amor de juventud que reaparece con aviesas intenciones y el abuelete que busca el amor en las redes sociales. De hecho, Book Club parece ser la versión “edad dorada” de las Carrie, Miranda, Samantha y Charlotte de Sexo en Nueva York. Como en aquella legendaria serie, las protagonistas de este insólito club de lectura hablan de forma desinhibida de sentimientos y sexo, conformando un mosaico de personalidades parlanchinas frente a una copa de vino. Los diálogos son chispeantes y muy graciosos, la mayoría de las veces pícaros, porque este grupo de maduras ya está de vuelta de todo.
La película es divertida, bastante clásica en su estilo y simpática en su abordaje de las problemáticas típicas de la vejez tales como la carencia de sexo, el pudor, la disfuncionalidad masculina y la negativa patológica ante el compromiso. No es revolucionaria en cuanto a reivindicar el feminismo, ya que las conversaciones giran en torno a maridos, hijos y amantes, pero sí hay algo novedoso que es dar protagonismo a mujeres que sobrepasan los 70 años. Si bien estas son gigantes de la interpretación cuya soltura y ligereza dramática se agradece mucho.
Reproducir vídeo
Calificación de la película