por Adelaida Valcarce
Aquaman es la sexta película del universo DC y la primera individual sobre el Señor de los Mares -encarnado por Jason Momoa– cuyo personaje conocimos brevemente en Batman vs Superman (2016) y en La Liga de la Justicia (2017). En ésta última también aparecía por primera vez la princesa Mera, aquí encarnada por Amber Heard.
El film de James Wan es un relato de origen, no hay problemas si se conoce poco o nada de superhéroes y esa independencia es un acicate más para ver la película porque no exige esfuerzo alguno en sabiduría de cómics. La cinta es una mezcla kitsch entre la leyenda del Rey Arturo, la aventura y jocosidad del videojuego Indiana Jones and the fate of Atlantis (1992) y los colores exaltados de Flash Gordon (1980) o Tron Legacy (2010). Dicho esto, es posible que algún espectador sienta a priori la tentación de salir corriendo ante el pastiche, pero sería una reacción errónea ya que nos encontramos ante un muy disfrutable film por la capacidad de Wan para reírse de lo que cuenta. Y pese a su dilatado metraje, el placer audiovisual que proporciona el visionado termina convenciendo al espectador más escéptico.
Por ponerle algún defecto, el villano Black Manta puede que esté un poco desaprovechado, aunque el resto del guión funciona y tanto Willem Dafoe como Nicole Kidman están correctos en sus roles. Y a destacar la química que fluye entre Momoa y Heard, que dará mucho juego en las previsibles secuelas. Lo que James Wan consigue, tal y como hizo con la séptima entrega de Fast and Furious tras la muerte de Christopher Walken, son secuencias de acción bien filmadas, espectacularidad estética y un ritmo trepidante, sin olvidar lo emocional de algunas secuencias, lo cual es algo muy positivo para DC y creo que un camino de futuro para la factoría de ficción. Resulta hasta sano apartar las sesudas reflexiones y reírse hasta de la propia sombra, olvidarse de la solemnidad y de la atmósfera sombría de antiguas producciones en aras de un espectáculo atractivo, para competir así definitivamente con Marvel. Veremos si en el futuro hablamos de un antes y un después para DC con esta película.