Y Jon Nieve, que luego de la expectativa generada alrededor de su verdadera identidad, termina sin reina, sin reino, ni pan, ni pedazo, aprisionado por un Gusano Gris que no sabemos cómo ha tomado la ciudad, pero que luego de mostrarse intolerante y radical, igual accede a que Tyrion, en un convincente discurso declare como nuevo rey a Bran El Tullido.
Y así podríamos seguir enumerando las inconsistentes y apresuradas resoluciones de los personajes y de la trama, que estuvieron majestuosamente fotografiadas, pero que fallaron en lo más importante, el guion. Con esa sensación se marcharon los cientos de fans que acudieron al evento, habiendo sido testigos de un final anticlimático y abierto, que ha dejado a la mayoría con un amargo sabor de boca.