Como en estas pocas líneas resultaría imposible reseñar todos los títulos presentados, prefiero centrarme en tres joyas que sobresalen sobre el resto de la programación. La primera es Jim Boton (Dennis Gansel, 2018), un monumental largometraje que ha tardado nada menos que 14 años en gestarse, basado en un superéxito literario y que ha acompañado, a través de una serie de televisión, la infancia de miles de alemanes. Basada en la novela de Michael Ende de 1961, fue escrita como contrapunto a la ideología nazi y su uso perverso de la teoría de la evolución. Era impensable fallar, y por eso se percibe un costoso y elaboradísimo trabajo de producción para erigir este mayúsculo film de aventuras, donde el compañerismo y la amistad férrea constituyen la base de una historia atemporal capaz de atrapar a niños y jóvenes, y donde los distintos escenarios discurren ante los asombrados ojos del espectador, ya que aunque la peripecia del film se inicia en Lummerland, una suerte de Arcadia, pronto se traslada con sus personajes (Jim Botón, el maquinista Lucas y la locomotora Emma) hacia lugares remotos y fantásticos, donde estos personajes lucharán con y contra dragones y rescatarán princesas, como en los cuentos clásicos. Festejar por último que la distribución de la película en España ya está garantizada gracias a Wanda Films.